Te mereces un buen plato de pasta

«Mereces un amor que te quiera despeinada con todo y las razones que te levantan de prisa, con todo y los demonios que no te dejan dormir»

Frida Kahlo

Pero, yo quiero añadir que mereces mucho más. Mereces a alguien que te quiera tal y como eres, tal cual. Que te quiera con o mejor sin maquillaje y destaconada, que le guste tu look de churripuerca a lo rollo manta y peli, tu sonrisa tonta recién levantada. Un amor al que no le importe si llevas vaqueros o vestido ( aunque tú sepas perfectamente cual te favorece mejor), porque, en realidad, como más le gustas es sin. Un amor que encuentre la magia fuera de tus imperfecciones, porque esas te las conoces perfectamente.

 

 

Que sepa leer tus gestos, que conozca cada uno de tus lunares, y de tus hoyuelos. Que sea capaz de contrarrestar tus días ñus (como yo los llamo) para que acaben siendo de 10.

Mereces un amor que sea cómplice de todos tus planes alocados y tus locuras extremas. Que haga los coros cuando cantas en la ducha, que te dejé repetir café aunque estés a 1000 por hora, que te dedique una canción en el karaoke, que te etiquete en todas los planes molones del groupon. Un amor que te saque a bailar a cualquier pista de baile, que no se oponga a pedir sushi después de un mal día en el trabajo.

Mereces un amor que te respete, que te anime a seguir creciendo, a salir de tu zona de confort, a ser ambiciosa, a quererte y valorarte que se involucre en tus problemas y rayadas, aunque no tenga la solución. Un amor autosuficiente, maduro, seguro de sí mismo, capaz. Que viva tus aficiones y comparta las suyas contigo (aunque sean demasiado aburridas).

 

Un amor de esos que duelen lo justo, que te reconforte. Que te de la seguridad que te falta. Algo fuerte como el acero. Que sólo necesite demostrártelo. Que no prometa, que sólo cumpla. Que corte cabezas cuando sea necesario y que siga cruzando tu mirada con la suya como el primer día.

 

Un amor apasionado, de los que no necesita que sea navidad para estar más romántico, ni que llegue tu cumpleaños para un ramo de flores.

Un amor que, como dice Frida Kahlo, te traiga la ilusión, el café y la poesía.