“Mujeres, ¡hum! que puedo decir. Dios debía ser un jodido genio. El pelo, dicen que el pelo lo es todo. ¿Alguna vez has enterrado la nariz en un monte de rizos y has querido dormirte para siempre?. Sus labios cuando han tocado los tuyos es como ese primer trago de vino después de haber cruzado el desierto»
Al pacino
El título que da nombre a este post es una de mis películas favoritas, «Scent of a Woman» con el tango más pasional que se ha bailado nunca. Para mí, la esencia, el aroma de una persona es uno de los mayores y más fuertes ADN que poseemos y que en mi caso, en muy raras ocasiones olvido.

¿Sabías que el sentido del olfato es el más emocional y creativo de todos? Un estudio publicado en el Journal of Personality and Social Psychology demostró que cuando estamos expuestos al olor de nuestras o nuestra persona ideal, disminuyen los niveles de cortisol, la hormona que liberamos cuando tenemos estrés.
Es común que, la elección de un perfume pueda llegar a ser una decisión personal o casualidad a la que no prestamos más de 5 min de nuestro tiempo, sin caer en la profundidad del asunto como «El aroma que será tuyo».
Huele, huele siempre
Nunca dejes de oler