Cuando era pequeña, mi abuela nos solía contar historias de su infancia y adolescencia: La vida de una familia numerosa, las verbenas del pueblo, los quehaceres del día a día, como conoció al abuelo… Recuerdo que mi hermana y yo escuchábamos embelesadas cada detalle e historia como si saliera de una nota de Edelweiss de Sonrisas y Lágrimas.
Desde aquel entonces ha llovido, pero seguimos siendo nosotras: abuelas, madres, hermanas, amigas, compañeras, Marie Curie, Madre Teresa de Calcuta,… todas ellas nos han llevado a ser lo que somos y dónde estamos hoy, mujeres y hombres.
Las muchas que como yo, conviven con equipo masculino, en mi caso en el sector del fashion os desvelo, de mujer a mujer: Pasión y agallas. ¡Reinventemos el concepto de éxito, ampliándolo al éxito interno, de bienestar interior! Seamos mujeres inspiradoras.






